El domingo 22 de septiembre se cumplieron 9 años desde la trágica partida de Valentina Maureira, menor que con sólo 15 años, solicitó a la -entonces- presidenta Michelle Bachelet, su eutanasia.
La menor, oriunda de Melipilla, fue diagnosticada con fibrosis quística a los pocos meses de su nacimiento, misma enfermedad que padeció Michael, su hermano, quien también murió por causa de la patología.
Tras el deceso de ambos, su padre, Freddy, comenzó con una cruzada para avanzar en algunas tareas que su hija le encomendó seguir, todo con el fin de visibilizar a los pacientes que sufren enfermedades de difícil diagnóstico y tratamiento, y -por cierto- entregar dignidad a sus familiares.
Y luego de 9 años, una de los deseos de Valentina estaría a punto de cumplirse. Freddy Maureira conversó con @RadioPrensa_ para anunciar que desde el Instituto Nacional del Deporte confirmaron la realización de una corrida por la donación de órganos.
Freddy agrega que esta noticia le pone contento de sobremanera, puesto que -con esta corrida- se logra cumplir una de las tareas que encomendó su hija, añadiendo que la idea es replicar este tipo de actividades en todo el país, para así, sensibilizar a la gente sobre la importancia de la donación de órganos.
En este año, Valentina pudo cumplir 24 años, sin embargo, su padre acusa que “el Estado llegó tarde”. Además, agrega que -otra de las tareas que dejó su hija- se puede realizar en Melipilla y sólo con voluntad política.
Finalmente, Freddy Maureira lamentó que la institucionalidad se haya ido “al carajo”. En paralelo, emplazó a las autoridades a estar con la gente, principalmente a quienes no lo están pasando bien.