Este lunes 31 de agosto se conmemoró un nuevo “Día Internacional de la Matronería”, una celebración diferente marcada por la emergencia sanitaria que aún afecta a nuestro país.
Han sido arduos meses de trabajo en que las matronas y matrones del Hospital San José de Melipilla, han enfrentado el desafío de seguir cuidando la salud de mujeres a lo largo de la provincia. Pacientes en etapa de gestación, puérperas y recién nacidos, promoviendo una atención más segura en medio de la pandemia.
Es así que, desde el servicio de maternidad, la urgencia maternal o el policlínico de alto riesgo obstétrico, los profesionales de esta área han demostrado su compromiso y vocación de servicio con las pacientes que a diario llegan al hospital.
Según Fabián Orellana, matrón supervisor del servicio de Ginecología y Obstetricia del reciento asistencial, la emergencia sanitaria “ha sido un desafío constante, lleno de nuevas adaptaciones en las maneras de trabajar para satisfacer las necesidades de nuestras usuarias. En un principio existía mucho temor al enfrentarnos a un virus, una pandemia de la que existía muy poca información, toda una situación que no nos había tocado vivir, lo que generaba mucha incertidumbre al momento de generar un cambio.
Sin embargo, todos lograron ponerse a la altura y ser los buenos profesionales que siempre han sido”, explicó.
LA IMPORTANCIA DE LA MATRONERÍA EN LA EMERGENCIA
La pandemia ha traído consigo muchas dudas y temores, especialmente en las pacientes en etapa de gestación que se preparan para dar a luz en medio de esta emergencia.
En este sentido el rol de las matronas y matrones ha sido fundamental, ya que en sus manos radica el cuidado, orientación y promoción de una atención de salud más segura que garantice el bienestar de las usuarias.
Para el profesional, la importancia de la matronería es transversal ya que “los chilenos seguirán teniendo hijos, y las matronas y matrones estarán ahí para asegurar el bienestar de la madre y del recién nacido. Haciendo lo posible para que el momento más importante de sus vidas sea de la forma mas segura y llena del amor”, indicó.
Además, agregó que “los profesionales se capacitaron y tomaron todas las medidas posibles para garantizar que la diada (madre e hijo) que llegaron sanos, vuelvan a su casa sanos. Y que las madres que llegaron contagiadas, puedan volver sin mayores complicaciones. Como matrón supervisor me saco el sombrero por el gran equipo de matronas y matrones que tenemos y por sobre todo por el trabajo que han realizado a lo largo de los años en nuestro hospital”, finalizó.
CGE.