Preocupada se mostró la dirigente de la junta de vecinos Foresta-Santa Laura, Marina Miranda por la gran cantidad de comerciantes irregulares que se pudo observar ayer en las calles de la población, pese a la cuarentena que rige en la comuna los fines de semana.
La calle Arza, desde el consultorio hasta Carlos Avilés se vio invadida de comerciantes, principalmente extranjeros, y de gente que salió de sus casas a comprar, lo que provoca importante aglomeración de personas.
La preocupación es porque ello puede generar un nuevo foco de infección de Covid 19 y porque además está generando problemas de seguridad, ya que también se produjeron algunas riñas.
Así lo indicó esta mañana a Radioprensa, Marina Miranda, quien pidió a las autoridades que tomen cartas en el asunto.
La dirigente dijo saber que hay necesidad, pero advirtió el riesgo que esta acción trae para la comunidad del sector.