Con la nariz fracturada, un derrame cerebral y diferentes contusiones resultó el sacerdote Osvaldo Caro, párroco de la parroquia Nuestra Señora del Carmen de Peñaflor.
El religioso fue atacado por una pareja de delincuentes la madrugada del sábado, quienes ingresaron a su casa para robar un computador y dinero en efectivo.
El dinero había sido obtenido gracias a las colectas para la reconstrucción de la iglesia, que aún mantiene daños por el terremoto de 2010.
Betzi Delgado, ayudante de la parroquia, señaló que el padre estaba durmiendo cuando fue atacado y reducido a la fuerza, siendo amarrado a su propia cama.
El padre de la parroquia Inmaculada Concepción de Talagante, Gustavo Aravena, lamentó el hecho que afectó al sacerdote peñaflorino, de 75 años.
El religioso pidió orar por la pronta recuperación del párroco de Peñaflor en este duro momento.
El Ministerio Público ordenó que ambas policías, la PDI en conjunto con carabineros investiguen el hecho y den con los responsables.