El alcalde de Casablanca, Francisco Riquelme y la alcaldesa de Melipilla, Lorena Olavarría, llegaron al centro de Santiago para presentar recursos de invalidación y reclamación contra el proyecto de línea de transición eléctrica Nueva Alto Melipilla, por su afectación a comunidades, naturaleza protegida y zonas de valor turístico.
A la oposición que levantan comunidades y organizaciones ambientales de Valparaíso y Casablanca contra la línea de transmisión que cruza desde Melipilla a Viña y que ya comenzó a construirse, se suman ahora el alcalde de Casablanca y la alcaldesa de Melipilla, que este lunes acudieron a la oficina del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) a interponer recursos para frenar el proyecto.
Desde ambos municipios sostienen que las obras dañan las formas de vida de sus habitantes, sumado a impactos en la flora y fauna nativa, el paisaje y la calidad del suelo.
Además declaran que, si los recursos de invalidación y reclamación presentados no generan la respuesta esperada, recurrirán al Tribunal Ambiental.