Este martes 14 de mayo, se cumplen 9 años desde el deceso de la joven Valentina Maureira Riquelme, adolescente que, con sólo 15 años, se hizo mundialmente conocida por solicitar su eutanasia a la expresidenta Michelle Bachelet.
La historia de la familia melipillana se remonta a un tiempo atrás, cuando el hermano de la joven, Michael, fue detectado con fibrosis quística, mismo diagnóstico que Valentina. La enfermedad terminó con la vida de ambos, por lo que su familia comenzó una cruzada que, hasta hoy, no tiene frutos concretos.
Por ello, esta mañana, Freddy Maureira, padre de Valentina, conversó con @RadioPrensa_, luego que concurriera a dejar una nueva carta al presidente Gabriel Boric, con el fin de avanzar en las tareas que la menor encomendó.
Freddy nos cuenta que –en los últimos meses- ha sostenido reuniones con el ministro del Deporte, Jaime Pizarro; y representantes del Ministerio de Salud, para avanzar en una de las misiones que Valentina dejó: hacer la corrida por la donación de órganos más grande del mundo.
A pesar de la notoriedad que alcanzó el caso de su hija, Freddy Maureira lamentó que –hasta ahora- no existan avances concretos en mejorar la situación de madres y padres que tienen a sus hijos con enfermedades graves. “Los señores políticos no están ni ahí”, expuso.
Es por lo anterior que Freddy llegó esta mañana hasta el Palacio de La Moneda a dejar la carta número 18 al presidente Boric, con el fin de que el mandatario le otorgue una audiencia y genere compromisos reales para avanzar en las labores que Valentina encomendó durante su corta vida.