Según el alcalde Sebastián Rosas, el domingo pasado se tomó la decisión de cerrar la piscina y dar prioridad a las personas con discapacidad. Esta medida busca proteger a las personas con movilidad reducida de los bañistas imprudentes y garantizar que los salvavidas puedan prestar atención especializada a estos vecinos.
Además, se entregaron entradas a los dirigentes sociales de las juntas de vecinos y organizaciones para que las repartieran entre sus socios, asegurando así su visita al parque.
Sin embargo, cualquier vecino puede asistir a la piscina pagando su entrada correspondiente. Es importante destacar que, aunque muchos vecinos creen que no debería cobrarse entrada debido a que es una piscina municipal, existe un alto costo de mantenimiento que no se cubre con los ingresos de la temporada estival.
El parque Tegualda es un lugar muy valorado por los vecinos, conocido por sus instalaciones y piscina. Cuenta con áreas verdes, canchas de fútbol, pista de patinaje y pista para bicicletas, además de mesas para picnic y servicios de alimentación.
La municipalidad busca garantizar que todos los vecinos puedan disfrutar de este espacio, priorizando la seguridad y accesibilidad.