Un proceso ejemplar se vivió este en la comuna de Melipilla en el marco del Plebiscito Constitucional.
Ya a las 9 y media de la mañana las 281 mesas habilitadas en los ocho recintos de votación dispuestos para este proceso estaban constituidas en un 100 % y recibiendo a los electores que comenzaban a llegar tímidamente a cada uno de los locales.
Cerca del mediodía, el número de votantes comenzó a incrementarse notoriamente generando largas filas en el frontis de todos los recintos.
Lo anterior debido a las medidas adoptadas por las autoridades con el fin de evitar aglomeraciones al interior de los locales, cuyo aforo máximo era de 10 personas.
Las filas se extendieron hasta cerca de las 14 horas. De ahí en más, el ingreso a los locales fue expedito y durante toda la tarde la gente siguió llegando de manera continua hasta aproximadamente las siete de la tarde.
Hasta el Liceo Politécnico llegaron también observadores de la Comisión Chilena de Derechos Humanos, los que hicieron un recorrido por el recinto.
Fuera de micrófono destacaron el buen desarrollo del proceso y se retiraron sin hacer observaciones.
A esa hora ya comenzaba la cuenta regresiva y los apoderados de los distintos partidos políticos comenzaban a organizar su trabajo en cada una de las mesas.
La noche cayó y con ella una compleja situación que generó molestia entre los vocales de mesa y los apoderados de un sector del Liceo Politécnico que tuvieron que hacer el conteo de los votos con las linternas de sus celulares, ya que inexplicablemente no había energía eléctrica. Pese a las dificultades lograron sacar adelante la tarea, aunque se retiraron muy molestos.
La jornada culminó con una masiva celebración que tuvo su punto central en la plaza de armas y una caravana que recorrió las principales calles de la ciudad.