Una vecina melipillana, adulta mayor y con dificultades para desplazarse, se acercó hasta nuestros estudios para manifestar su preocupación por la falta de respeto hacia los estacionamientos destinados a personas con discapacidad.
Señala que, a pesar de la clara demarcación y la simbología, conductores irresponsables continúan ocupando estos espacios esenciales para personas que, como ella, necesitan estacionar sus vehículos para acceder a distintos lugares.
Ella es Rosa Araya, quien quiso hacer público este tipo de comportamiento con la esperanza de que alguien tome cartas en el asunto.
Agregó que, a parte de la poca consciencia de los conductores, hay también un problema con la fiscalización que no se está haciendo adecuadamente.
Finalmente, Rosa Araya solicitó a Carabineros que refuerce su trabajo de fiscalización e invitó a los conductores a ser más empáticos.